Casi no se puede creer, que ya pasó un cuarto de siglo, desde la caída del Muro en Alemania, que este y oeste fueron nuevamente reunificados. En donde hubo una frontera herméticamente cerrada, en donde los intentos de fuga eran impedidos a fuerza de armas, allí hoy en día se pueden observar amables carteles de bienvenida de un estado a otro dentro de un país reunificado.

El día de la reunificación Alemana continua siendo un día de Alegría, no sólo para los ciudadanos alemanes sino para personas de todo el mundo, ya que marca una fecha en la que finalmente fue superado lo que dividió durante tanto tiempo a la humanidad.

A esto se llegó no sólo gracias a los políticos, sino principalmente gracias a los ciudadanos, al pueblo alemán. La Reunificación no hubiese sido posible sin la revolución pacífica en la RDA.

En 1989 y en 1990 muchos ciudadanos de la RDA exigieron, libertad, democracia y un estado de derecho. Protestaron contra el fraude electoral, fundaron movimientos ciudadanos, que en otoño del 89 fueron ganando en concurrencia. Huyeron de a miles a Hungría y a la Embajada de la República Federal Alemana en Praga y resistieron allí hasta que les fue posibilitado su entrada a ese país.

Sin la valentía y coraje de estos ciudadanos y su presión para la lograr la reforma y las libres elecciones, no se hubiese llegado el 9 de noviembre del 1989 a la caída del muro y finalmente a la Reunificación el 3 de octubre de 1990.

La gran esperanza tras la Reunificación radicaba en la mayoría de los ciudadanos de la RDA, en la libertad para viajar, de poder expresarse libremente y en una mejoría de la situación económica, o sea de su vida cotidiana.

Hoy pueden constatar que la mayoría de esos deseos pudieron hacerse realidad. En Alemania Oriental se hicieron muchos avances. Ciudades que antes eran grises y estaban medio destruídas, se llenaron de color y desarollaron su propio y nuevo sentido de vida. La diferenciación entre Este y Oeste va perdiendo cada día más su importacia y el estado alemán se consolidó en una fuerte unidad que alcanza a todos y que aboga por otros.

Justamente en tiempos, en los que existen personas en el mundo que padecen grandes necesidades y a los que a causa de guerras civiles les es quitada toda base de vida y tienen que huir de su tierra natal, para recomenzar una nueva existencia, en estos tiempos es obligación de Alemania y de todos los países económica, y políticamente estables, darle asilo a estas personas y ofrecerles así una nueva oportunidad.

Por qué, se preguntarán algunos? Porque Alemania está en condiciones de hacerlo.

„Nosotros vamos a lograrlo“ fueron las palabras de Angela Merkel en uno de sus discursos sobre la situación actual de los refugiados en Alemania.

Es una gran tarea nacional- se esperan este año alrededor de 1.000.000 de refugiados de Siria, Afganistan, Irak y Eritrea, „pero“ aclara Angela Merkel, „dónde haya obstáculos, estos deberán ser superados“

Porque tal como hace 25 años, Alemania logró la gran tarea de la reunificación y de tirar abajo un muro, así también podremos superar también este desafío, el de brindarle a los necesitados una mejor calidad de vida y posibilitarles una vida digna en libertad.

Libertad…

es lo que estamos festejando en el día de la Reunificación Alemana.

Libertad es el valor por el que hace 25 años pelearon los Alemanes del este y por el que hoy aun siguen peleando centenares de personas en todo el mundo.

Gracias.

 

Departamento de Alemán
Instituto Primo Capraro